Las coordenadas precisas y fijas,
el destino de todo lo bello que quepa en mí,
un sonido impensable, irreducible.
Canta la pieza de los tres
y del amor profundo.
El sueño de todos los días,
otra vez [eres] la misma canción.
Otra vez la misma rima.
Ducha de vapor que sofoca
y quita la vida.
No puedo respirar,
te me hundes
muy por dentro
te me quedas.
Toca la pieza para siempre,
bien pegada.
Que no, si me quedo en la Luna.
Que no, si me bajas del cielo.
Deja la pieza en que me empujas siempremente
y te me quedas.