pero nunca disturbios por decisiones,
los ríos caudalosos gritan,
los lagos tranquilos respiran.
La vida se pasa en eso,
respirando y gritando por conciencia,
dignificando cada acto producto de ella,
congratulando lo bueno y castigando lo cotidiano.
Amigo, nunca te separes de ella,
será tu fiel consejera, tu guía hasta la muerte,
dotará de color lo común
o hará los días mas negros
que una noche nublada.
Todo se va en cosas que pasan,
se hacen rancias o se avivan,
oler una espiga o caminar en fuego,
cada cosa es la construcción
de ideas que juntas conforman
el hecho de estar vivo.
Por Carlos Osorio.